EL PRECIO DEL PODER (1983)
"En este país primero hay que tener dinero, cuando tienes el dinero tienes el poder y cuando tienes el poder tienes las mujeres" (Toni Montana- Scarface)
Esta obra escrita por Oliver Stone y dirigida por Brian de Palma, cuenta la historia de Toni Montana (Al Pacino), un asesino cubano con grandes ambiciones por cumplir el ansiado sueño americano del que acaba haciendo su versión personal: "¿Sabes que es el capitalismo?. Joder y ser jodido!
Scarface o El precio del poder combina el drama, el suspense y el crimen, sin embargo hay que recordar que no es una obra original sino un remake de la versión de comienzos de los años 30 de Howard Hawks (Óscar honorífico en 1975), conocido por sus trabajos de cine negro (Criminal Code), westerns (Río Rojo, Río Bravo y Río Lobo) y comedias (Gentlemen prefer blondes).
Respecto a la estética de la película, hay que decir que está muy marcada por un vestuario estigmatizado y excéntrico propio del crimen organizado (resulta muy identificativo para el público), unido a un estilo de vida lleno de lujos y derroches. El uniforme masculino de Toni Montana evoluciona desde las cloacas del crimen a los despachos llenos de "nieve".
Comienza con un estilo muy caribeño, lleno de camisas desabrochadas, con estampados grandes y colores llamativos (similar a sus iguales en estatus). Si nos fijamos en sus pies, encontramos zapatos oscuros, blazers o trajes completos siempre en el mismo color. Sus trajes comienzan siendo más claros y de "peor gusto", sin embargo a medida que su personaje va medrando en la escala económica y social, utiliza trajes más ajustados en el talle de tonos más oscuros y camisas más clásicas en corte y color. El objetivo de este cambio es mostrar como Toni "va comprando" la elegancia y el buen gusto con el dinero sucio de la droga.
Los vestidos y outfits de Elvira, Michelle Pfeiffer, resaltan siempre su escote en forma de uve (cosa que favorece también su corte de pelo por encima de los hombros) y su altura. Su línea de vestuario viene a retratar a una mujer superficial, inaccesible si no tienes una buena cartera, drogadicta y sumida en la soledad que acompaña de lujos. A Elvira no le tiembla el semblante al cambiar de hombre mientras siga teniendo de su lado droga y dinero. Los tejidos que predominan son las sedas, los paillettes... Los colores son llamativos como el rojo fuego y el azul intenso, entre otros para la noche, mientras que para el día prefiere los tonos más claros y sus inseparables gafas de sol redondeadas, muy Audrey Hepburn.
Sígueme en Twitter: @Car_C_Brezmes
No hay comentarios:
Publicar un comentario